Cuando Ethan nació hubo complicaciones durante el parto y el doctor que atendió a su mamá le indicó que habían lastimado uno de sus pies al momento de realizar las maniobras.  Durante los primeros meses en casa le realizaron los ejercicios de acuerdo a lo que les habían indicado, sin tener mayores resultados. 

Su mamá comenzó a buscar más información para encontrar lo que su hijo tenía y buscar un tratamiento correcto. Es así como, con la recomendación del Dr. Navas, médico traumatólogo, llega Ethan a FUNDAL e inicia su proceso.

Desde que llegamos a FUNDAL, narra su mamá, a la familia FUNDAL como yo les llamo, hemos visto los avances gracias a todo el proceso que se ha llevado a cabo. En la primera fase le colocaron 5 yesos para corregir la posición del pie.  Luego se le realizo la operación en el hospital. Y lo más complejo fue el uso de la barra por 23 horas ya que se desesperaba por no poder moverse con libertad.  

Hemos aprendido a disfrutar cada etapa del proceso. Él aprendió a gatear, se paró, y ahora ya está comenzando a caminar y en todo esto FUNDAL ha sido una parte fundamental.  No existen palabras para agradecer al equipo de FUNDAL por lo que han realizado con el tratamiento, y celebramos cada logro. Aún seguimos con las terapias, las evaluaciones y la barra.